Restoring the rule of law to public administration : what Frank Goodnow got right and Leonard White didn ́t
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ArtículoDetalles de publicación: Estados Unidos :Descripción: pp.803-812Tema(s):
En: Public Administration Review - Vol.69 No.5Resumen: Resumen: Aunque el estado de derecho es universalmente reconocido como un principio fundamental de la gobernabilidad democrática, el campo de la administración pública sigue mostrando la "condición antijurídica" que surgió en los años 1920, cuando la dirección de Leonard White fue desplazada por Frank Goodnow quien enfatizo en la separación de la ley y la administración. A pesar de que el derecho administrativo es un subcampo de la administración pública, la opinión de consenso dentro de la profesión parece ser que la ley es una de las muchas limitaciones sobre la discrecionalidad administrativa en lugar de su origen, un desafío para el liderazgo administrativo es darle su lugar a este campo. Además de inaceptable la reducción de la escala de valores de la infusión de la administración pública, esta visión debilita la capacidad de la profesión para contribuir al diseño de aportes en el gobierno en un momento en que las instituciones constitucionales están siendo seriamente cuestionadas. Para cumplir con su función constitucional, la administración pública debe comprometerse con el Estado de Derecho como una institución que garantiza su legitimidad.
Resumen: Aunque el estado de derecho es universalmente reconocido como un principio fundamental de la gobernabilidad democrática, el campo de la administración pública sigue mostrando la "condición antijurídica" que surgió en los años 1920, cuando la dirección de Leonard White fue desplazada por Frank Goodnow quien enfatizo en la separación de la ley y la administración. A pesar de que el derecho administrativo es un subcampo de la administración pública, la opinión de consenso dentro de la profesión parece ser que la ley es una de las muchas limitaciones sobre la discrecionalidad administrativa en lugar de su origen, un desafío para el liderazgo administrativo es darle su lugar a este campo. Además de inaceptable la reducción de la escala de valores de la infusión de la administración pública, esta visión debilita la capacidad de la profesión para contribuir al diseño de aportes en el gobierno en un momento en que las instituciones constitucionales están siendo seriamente cuestionadas. Para cumplir con su función constitucional, la administración pública debe comprometerse con el Estado de Derecho como una institución que garantiza su legitimidad.
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