Resumen: Un cambio fundamental en la relación entre el estado y la privacidad financiera individual. La responsabilidad está en los ciudadanos para manifestar por qué los gobiernos no deberían tener acceso a su información financiera personal. Este artículo argumenta que este cambio se ha producido en gran parte por las actividades de redes transnacionales autónomas y reguladores influyentes. Estas redes reguladoras sistemáticamente han favorecido la eficiencia administrativa y transparencia a expensas de la privacidad en el diseño de respuestas a los abusos financieros. Evidencia que proviene de un examen de la evolución reciente de la política en la lucha contra la evasión fiscal, lavado de dinero y la financiación del terrorismo.

0