Resumen: Un administrador y un trabajador están en una relación infinitamente repetida en el cual el administrador privado observa sus costos de oportunidad de pagar al trabajador. Se muestra que el contrato relacional óptimo genera conflictos periódicos durante el cual el esfuerzo y los beneficios esperados declinan gradualmente pero se recuperan instantáneamente. Para gestionar un conflicto, el administrador utiliza una combinación de promesas informales y compromisos formales que evolucionan con la duración del conflicto. Finalmente, se demuestra que las limitaciones de liquidez limitan la capacidad de los administradores para administrar conflictos pero también pueden inducir al trabajador para responder a un conflicto.

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