Resumen: Bahrein, donde una monarquía suní ha gobernado durante mucho tiempo sobre una mayoría chií, vio un breve movimiento de las protestas en febrero de 2011. El más grande fue brutalmente reprimido con la ayuda de las tropas de la vecina Arabia Saudita. Sin embargo las protestas más pequeñas han continuado. Violentos enfrentamientos estallaron el 6 de diciembre, cuando el gobierno organizó una emboscada de seguridad con militares de la región. En varios pueblos jóvenes lanzaron piedras y bombas Molotov. Organizaciones de derechos humanos advierten que la situación se está deteriorando. El gobierno ha empujado el movimiento de protesta en una dirección más radical al representar su levantamiento como una lucha sectaria en lugar de una llamada para la democracia.

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