Resumen: Desde que Argentina pagó 81 billones de la deuda en 2001, ha sido displicentemente con sus acreedores. Quienes rechazaron sus ofertas en 2005 y 2010 para intercambiar valores incobrables por nuevos bonos de menos valor han tenido una serie de juicios en los tribunales estadounidenses ordenados por el país para pagar. Pero Argentina tuvo pocos activos en América que podrían aprovechar hold outs (fondos de inversión fuera del país). Los acreedores gobernados por Elliott Management, fondo de inversión de Nueva York dramáticamente ha fortalecido su posición.