Resumen: La abrupta renuncia del primer ministro Hazem Beblawis al gobierno el 24 de febrero, después de sólo siete meses en el cargo, fue una gran sorpresa. Ministros salientes también expresaron su desconcierto por su repentina partida, antes de las elecciones previstas para elegir Presidente y Parlamento que necesitaría el nombramiento de un nuevo gabinete. Muchos asumieron que era parte de una maniobra elaborada para allanar el camino para el anuncio ampliamente anticipado por el mariscal de campo Abdel Fattah al Sisi, en Egipto el Ministro de defensa y el líder del último golpe de julio que derrocó a la hermandad musulmana, que correría para el Presidente.