El presente ensayo ofrece un espacio de reflexión dirigido a los Operadores del Sistema Acusatorio en relación con la implementación de una nueva técnica de gestión de la investigación penal en nuestro país, denominada priorización. Que no solo se viene aplicando en Justicia y Paz, sino que hoy sus criterios forman parte de la Justicia Penal Ordinaria como instrumento de Política Criminal; de tal manera que se ha dejado de lado a iniciativa de la Fiscalía General de la Nación el modelo de investigación penal individual y de carácter maximalista en el que fuimos formados y veníamos ejerciendo, para pasar a una investigación de análisis de contexto en donde se priorizan situaciones y casos; estando llamados desde ya a formar parte de su construcción y en últimas a conocer sus contenidos básicos e incidencias y los instrumentos normativos para su desarrollo, ajustando así nuestro rol y actividades procesales en función de los interés que representamos.